Una de las habilidades más importantes que necesitamos desarrollar en nosotros mismos y en nuestros hijos es la habilidad de aprender a aprender. Pero, ¿qué habilidad es esa?
¿Cómo aprendemos a aprender? Aprender a aprender requiere que aprendamos a navegar los estados de ánimo en los que habitualmente caemos durante el proceso de aprendizaje. Aveces cuando estamos esforzándonos por desarrollar una nueva habilidad, no es raro encontrarnos en estados de ánimo improductivos que pueden bloquear nuestro aprendizaje, tales como el agobio, la resignación, la frustración o la ansiedad. Eso es normal y ocurre regularmente durante el proceso de aprendizaje.
Sin embargo, si queremos seguir aprendiendo es fundamental que aprendamos a salir de los estados de ánimo que obstaculizan nuestro aprendizaje, y a cultivar otros que sean más conducentes a continuar aprendiendo, tales como la ambición, la seguridad, el asombro y la confianza.