Es alta y temo que se vaya a golpear la cabeza con el compartimiento superior, pero no lo toca, sobran unos centímetros. Luego, levanta la maleta sobre su cabeza.
Dejo las flores en el asiento y me acerco para ayudarla, tomo el borde de la valija para equilibrarla. Percibo un sutil aroma a menta que emana de su cabello