A veces, una persona evitativa que no tuvo sus necesidades satisfechas en la niñez puede no dar importancia a sus propias necesidades en la edad adulta. Incluso puede que no sea consciente de ellas, especialmente si no es propensa a la introspección. Tuvo que enfrentarse a la angustia de forma continuada por su cuenta a una edad inapropiada, lo que puede que provocara la inhibición de algunas respuestas naturales de adulto. Incluso si estos individuos son conscientes de sus necesidades personales, pueden tener tendencia a rechazar los intentos de sus seres queridos de ayudarlos y protegerlos.