Gail Honeyman

Me di cuenta de que esos pequeños detalles —igual que su madre me había hecho una taza de té después de comer sin preguntar y había recordado que no tomaba azúcar, o como cuando Laura puso dos galletitas en el platito del café que me trajo en la peluquería—, ese tipo de cosas, pueden significar mucho

apenas ingiero alcohol en público. Solo lo disfruto cuando estoy sola en casa

Un día estaba desayunando sandía, feta y granada, y al siguiente comía Mother’s Pride tostado y untado de margarina