“El gran disparate”, aunque no pretende ser una novela histórica, tiene como eje vertebrador los hechos acaecidos en Cataluña a raíz de la sentencia del Tribunal Supremo a los líderes del proceso secesionista catalán en otoño de 2017. El autor incorpora a estos acontecimientos la ficción con dos historias paralelas que se complementan y que se verán afectadas por la situación política Sus personajes verán sus vidas involucradas en un carrusel de acontecimientos cada vez insólitos. Ciertamente, la obra está escrita desde un punto de vista del observador que quiere ser distante de lo emocional y cercano a lo racional Sin embargo, en la novela tienen cabida todos los puntos de vista que se expresan con absoluta libertad. Es una invitación del autor al lector para que saque sus propias conclusiones y, si le parece oportuno, se posicione, o no.