El protagonista en esta novela es, sin duda, Los Ahogados de Sepúlveda, el rancho a cargo de don Fernando de Villalobos, rico hacendado con dos hijas y una trágica historia a cuestas. Los acontecimientos giran alrededor de su familia y sus empleados, las marcadas diferencias entre clases y las problemáticas a que se enfrentan, sobre todo, las mujeres en ambos extremos de la escala social.
La autora se abre camino a través de perspectivas y situaciones que a simple vista se contraponen, pero que son hilvanadas a detalle conforme la trama avanza, se complica y se transforma, tomando diversas tonalidades y adquiriendo nuevos matices, para poder ofrecer al lector un panorama completo de la vida en el campo, tanto en lo privado como en lo público.
La obra de Rebeca Ramos Pérez no teme detenerse a escuchar las voces de sus personajes; entretenida, llena de contrastes, preguntas y crítica social, tiene mucha vida que contar.