Karolina es una muñequita que mientras escapa de la guerra que las ratas han llevado a su hogar encuentra ayuda en el viento bondadoso y es enviada al mundo de los humanos, específicamente a las manos de un hombre polaco que fabrica juguetes. Y llega justo cuando los nazis han empezado a pulular en Cracovia, arrastrando tras de sí un montón de desdicha y tragedias que Karolina espera, con ayuda de su nuevo amigo, poder erradicar. O al menos ayudar a sus amigos a escapar.
No he visto el libro en físico pero admito que la portada tan bonita fue lo que de entrada me llamó la atención. Ya luego de agregarlo a mi estantería leí la reseña jaja. Pero cuando comencé a leerlo me di cuenta de que no era lo que esperaba. Por un momento sentí que tal vez yo no era el público al que va dirigido, que era algo más infantil tanto por los personajes principales como por la narración, que es tan ligerita que me recordaba a un cuentito. Afortunadamente no lo abandoné porque conforme la historia va avanzando las cosas se empiezan a poner más densas y bueno, aunque ya tenía una idea de cual sería el final, definitivamente me sorprendió mucho. Y luego de leer la nota de la autora al final, confirmo que no, no es un libro infantil jaja pero también comprendo y me calan hondo las razones por las que decidió crear esta historia, porque en el mundo en el que ahora vivimos es justo y necesario recordar algunos acontecimientos del pasado para no caer en los mismos errores.
Definitivamente recomiendo darle una leída; en momentos se pone un poco pesado o tedioso pero creo que el final vale la pena.
Un libro con un trasfondo cultural, lleno de añoranza y tristezas pero al mismo tiempo csrgado de esperanza y la promesa de un mejor futuro.
Perfecto