Medea

Por qué vacilamos en realizar un crimen terrible pero necesario? ¡Vamos, desdichada mano mía, toma la espada! ¡Tómala! ¡Salta

, que tú los has dado a luz! ¡Olvídate por un breve instante de que son tus hijos y luego... llora! Porque, aunque los mate, ten en cuenta que eran carne de tu carne; seré una muje

no puedo saber si crees que los dioses de antes ya no reinan, o si piensas que ahora hay leyes nuevas entre los hombres, porque eres consciente, qué 495 duda cabe, de que no has respetado los juramentos que me hiciste.

hice con la intención de llevar una vida feliz y 560 sin carecer de nada, sabiendo que al pobre todos le huyen, incluso sus amigos,

, ni arrojo ni audacia es mirar de frente a los amigos después de haberles hecho un mal, sino el mayor de los vicios que el hombre puede albergar: la desvergüenza

pero, después de las amenazas que has lanzado contra los soberanos, considera una ganancia total el ser castigada con el destierro.

si soy cogida en el momento de atravesar el umbral y dar el golpe, mi muerte será el hazmerreír de mis enemigos. Lo mejor es el camino directo, 385 en el que soy muy hábil por naturaleza: matarlos con mis venenos

que te 355 acabo de decir no es falso. Y ahora, si debes quedarte, quédate un día, pues no podrás llevar a cabo ninguna de las acciones que me aterran.

habiendo podido arruinar mis proyectos expulsándome de esta tierra, ha consentido 375 que yo permaneciera un día, en el que mataré a tres de mis enemigos, al padre, a la hija y a mi esposo.

Oigo decir que amenazas, así me lo refieren, con hacer algo contra el padre que ha concedido en matrimonio a su hija, contra el esposo y la esposa. Antes de que esto suceda, tomaré mis precauciones.