El ingenio y la sabiduría de Bertrand Russell

Nunca estimo adecuado el castigo físico. En sus formas leves, hace poco daño, aunque ningún bien; en sus formas severas, estoy convencido de que genera crueldad y brutalidad.

El castigo más severo que debería ser necesario alguna vez es la expresión espontánea y natural de la indignación.

El sistema educativo ideal ha de ser democrático, aunque ese ideal no es inmediatamente alcanzable.

Por mi parte, creo que el castigo tiene un cierto lugar muy reducido en la educación, pero dudo de que alguna vez haya de ser severo

su problema consiste en difundir información sin difundir inteligencia

Creo que el amor a la verdad es la base de toda virtud real

La educación no debería producir ni aquiescencia al escepticismo ni aquiescencia al dogma

Es necesario practicar la duda metódica, como Descartes

Estas cuatro pasiones (codicia, vanidad, rivalidad y amor al poder) son, después de los instintos básicos, los motores principales de casi todo cuanto sucede en la política.

el tiempo ha mostrado muchos defectos en las teorías de Marx.