Sabias palabras de Eduardo Jordá tras la muerte de Cohen: «Cuando pienso en sus letras, que me aprendí de memoria hace muchos años, y que me hicieron extrañamente feliz, a pesar de que se suponía que estaban concebidas para expresar la desdicha –pero también el amor y el éxtasis y la soledad y la desesperación–, hay una palabra que se me viene una y otra vez a la mente: longing. Creo que no hay otra palabra que pueda resumir mejor la obra de Leonard Cohen. Porque longing no es solo anhelo, como a veces se traduce al castellano, sino muchas cosas más: es añoranza y al mismo tiempo es un ardoroso deseo carnal; es tristeza y lujuria, solo que fundidas en una misma experiencia, porque es el éxtasis del amor que se ha hecho inseparable del miedo a perderlo (o de la desolación por haberlo perdido ya).» No creo que pueda ceñirse mejor el arte de Leonard Cohen.