Mientras el científico se encuentra concentrado en la búsqueda permanente de nuevos materiales, los sistemas procuran que esas innovaciones incidan en la economía interna, atacando primordialmente el consumo de los hidrocarburos. Como sabemos, una explosión de nuevos materiales ha hecho obsoletos a otros que aún son considerados como sinónimos de progreso industrial. Tal es el caso del acero, que está siendo sustituido por la cerámica, que es un material más económico y versátil, y sobre todo de un costo de producción muy inferior a la tradicional y pesada industria siderúrgica; de hecho, en el norte de nuestro país la Nissan empezará a muy corto plazo a producir los motores de cerámica. Lo mismo sucede con la fibra óptica que sustituye, en la industria de la telefonía y en otras aplicaciones, al tradicional conducto de cobre de cinco centímetros de diámetro que ahora es sustituido por un filamento del grueso de un cabello (la fibra óptica) con una calidad de condiciones insuperables.
En síntesis, algunos países como Alemania, que en el pasado se distinguieron por su gran industria pesada, hoy enfrentan el reto de la modernización inmediata, antes de ser arrojados a la orilla en los mercados internacionales por falta de competitividad.
Aquí menciona o hace énfasis en la
modernización que deben de realizar algunos países como alemania, así también toca el tema de el cambio que se está haciendo debido a la recurrencia de una mano de obra y producción más económica, un ejemplo es el de la empresa Nissan que sustituye los motores de acero por motores de cerámica y también el cambio que se hace del hilo del cobre a la
fibra óptica es por eso que se dice que se buscan nuevos materiales