Comer con gratitud es una forma de apreciar la comida y todos los recursos que se necesitaron para traerla a nuestra mesa. Cuando comemos con gratitud, nos conectamos con la fuente de nuestra comida, ya sea la tierra, los animales o los trabajadores que la cultivaron y prepararon. También estamos conectando con las personas que comparten nuestra comida y con la experiencia de comer en sí.
Al comer con gratitud, podemos generar más conciencia y aprecio por nuestras comidas. Podemos saborear nuestros alimentos y concentrarnos en cómo nos hacen sentir. También podemos estar agradecidos por todas las cosas buenas de nuestra vida, incluida la comida que tenemos disponible.
Al comer con gratitud, podemos mejorar nuestra salud física y mental. Los estudios han demostrado que las personas agradecidas tienden a ser más sanas, felices y exitosas. Comer con gratitud también puede ayudarnos a reducir el estrés, mejorar nuestro sueño y aumentar nuestra energía.
Si quieres empezar a comer con gratitud, aquí tienes algunos consejos:
Antes de comer, tómese un momento para concentrarse en la comida y en todas las personas y recursos involucrados en llevarla a su mesa.
Saborea tu comida y concéntrate en cómo te hace sentir.
Den gracias por todas las cosas buenas en sus vidas, incluyendo la comida que tienen disponible.
Come con otras personas y comparte tu comida con ellos.
Haz de la comida una experiencia agradable y placentera.
Al comer con gratitud, puede mejorar su salud física y mental, y traer más conciencia y aprecio por sus comidas.
