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Bøger
Natalia Ginzburg

El camino que va a la ciudad y otros relatos

  • Andrea Bhar citeretfor 5 år siden
    La memoria es una forma de amor, pero jamás es casual. Hunde sus raíces en nuestra propia vida, y por eso sus elecciones jamás son casuales, sino siempre imperiosas y apasionadas
  • Denisshar citeretfor 6 år siden
    Descubrí que un relato breve es necesario tenerlo entero en la cabeza, como si estuviera perfectamente encerrado en su cáscara, mientras que una narración larga se desovilla sola, casi se escribe por sí misma
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Aquella casa se había convertido en un lugar preciado para mí, pero me parecía que no tenía el derecho de vivir en ella porque no me pertenecía, porque la había compartido con un hombre que había muerto sin decirme una palabra.
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Me senté en el sofá en el que acababa de decirme que habíamos aprendido a vivir juntos. Ahora entendía lo que había querido decir. Él había aprendido a mentirme
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Había algo en ti que me hizo pensar que tal vez me perdonarías, que estarías dispuesta a ayudarme, y que si me portaba mal contigo no tendría importancia porque habríamos aprendido a amarnos y todo lo demás sería agua pasada.
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    La primera vez que te vi pensé: «Me gusta esta mujer, quiero amarla, quiero que me ame y me ayude, quiero ser feliz con ella».
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Desde mi primera adolescencia había pensado que un acto como aquél debía transformar necesariamente a las dos personas, distanciarlas o unirlas para siempre. Ahora sabía que podía no ser así. Aterida de frío, me cerré bien el abrigo. No me había convertido en otra persona.
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Me había dado cuenta de que el amor de Vilma por Vrasti no era real, sino fruto de su imaginación. Ella se aferraba a la única persona que, desde su punto de vista, podía salvarla, pero tal vez en el fondo era consciente de que se trataba de algo forzado y falso, y eso la hacía sufrir todavía más.
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Entonces se vio solo a la mesa y descubrió por primera vez que una mesa en la que ya se ha comido tiene algo de triste, con todo ese desorden de migas y mondaduras y vasos medio vacíos y servilletas arrugadas.
  • Ivana Melgozahar citeretfor 2 år siden
    Y Anna le regalaba al niño todo tipo de juguetes serios, difíciles, mientras que Maurizio le llenaba el armario de los hermosos juguetes de siempre, sencillos y fascinantes, y era capaz de llegar a casa con tres globos rojos, porque también le habían encantado cuando era niño.
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