El priorato del naranjo

Morir en aras de un mundo mejor sería el mayor honor posible.

Vos no habéis visto la muerte, milord. Solo habéis visto la máscara que le ponemos

Algunas verdades están más seguras bien enterradas. Algunos castillos están mejor en las nubes. Los relatos no contados albergan promesas. En el reino de las sombras, desconocidos para la mayoría.

Una mujer es algo más que un vientre que fecundar.

Mi historia bastaría para llenar un libro.

»Tú me quisiste. Sin condiciones. Tú viste la persona que podía llegar a ser. Y seré esa persona, Jan. Resistiré, mi sol de medianoche. —Tocó el rostro de piedra una vez más, aquellos labios que tanto se parecían a los de verdad—. Le enseñaré a mi corazón a latir de nuevo.

Ningún artista había sabido reflejar la dimensión del enemigo, el modo en que le hacía humear el fuego que llevaba dentro. No habían podido verlo por sí mismos.

Entonces yo era más joven. Me dominaba mi corazón sensible.

aunque no tuvieras pruebas… pero la verdad siempre encuentra el modo de salir a la superficie.

Tras cada trono hay un sirviente enmascarado que solo busca convertir en marioneta a quien se sienta en él.