Escrita a mediados de los cincuenta, la época más fructífera de Emilio Carballido, esta obra teatral relata la historia de una familia unida, a partir de la vida de dos de sus miembros: dos tías solteronas y la relación que mantienen con uno de los jóvenes del pueblo donde viven. Comedia de equívocos es, al mismo tiempo que entretenida, una protesta en contra del machismo, el provincianismo y las costumbres de la clase media mexicana. «El dramaturgo -decía él— debe descubrir los mecanismos sociales y las causas profundas, tanto psicológicas como los diversos determinantes que tiene el ser humano, y encontrar su sentido y relación de los valores generales.» Del también novelista, crítico literario y cuentista, Sabina Berman escribió: «rara fue una obra suya que no tuviera éxito y rara también una línea de texto suyo que no provocara precisamente lo que Carballido había querido lograr en el espectador.»