Se ha confirmado en personas de diferentes culturas, tanto adultos como niños, que esta es la región específica del cerebro que se activa en primera instancia cuando se extrae información numérica del mundo, antes aun de que se convierta en palabras o se haga aritmética con esos números. Estas últimas son tareas que utilizan distintas partes del cerebro y que, de hecho, dependen de la cultura, en función de si se hace aritmética con palabras habladas, símbolos escritos o un ábaco, por ejemplo. Los números presentados en cualquier formato, incluso como palabras habladas o como símbolos numéricos escritos, activan esta misma parte del cerebro.