Estos “Me acuerdo” no son exactamente recuerdos, ni siquiera recuerdos personales, sino más bien pequeños fragmentos de lo cotidiano. Georges Perec, Me acuerdo, 1978
Para un baile de carnaval, me puse guantes de arquero y buzo de arquero y rodilleras de arquero. No obstante, por la calle, una chica me paró para preguntarme de qué me había disfrazado.
Martín Kohan
¿La memoria es transferible? ¿Lo que recuerda una persona puede ser análogo al recuerdo de una generación? Este libro nos lleva a conocer los recuerdos de uno de los mejores escritores de su generación y al mismo tiempo que disfrutamos de su literatura podemos disfrutar de las poderosas imágenes que evoca.