Una novela populosa no solo en personajes, sino también en argumentos y en géneros: una novela negra, una novela de los primeros días de la guerra y una novela sobre la transición. Los puntos de confluencia de estas tres historias son dos hechos delictivos que habrán de ser investigados por Héctor Vázquez: el asesinato de Víctor Sonseca, el nieto del patriarca de esa familia, y el robo de El señor de las tribulaciones, una valiosa talla que estuvo en manos de este último. Un charco de tramas políticas, sociales y económicas de unas islas convertidas en un profundo vertedero.