La distinción entre lo posible y lo real, entre esencia y existencia, parece tan obvia que no nos damos cuenta del proceso largo y laborioso que ha llevado a escindir el ser, la “cosa” del pensamiento, en dos fragmentos opuestos e íntimamente entrelazados.
La máquina ontológico-política de Occidente, sin la cual la ciencia y la política no serían posibles, se basa precisamente en ella. Este ensayo reconstruye el nacimiento de la escisión fundacional y el proceso de sus posteriores articulaciones en la filosofía y la política de Occidente.