Maricela Guerrero

Un libro lleno de sensibilidad, de verde, de vida, de sueños.

Un hermoso y doloroso poemario sobre el mundo que habitamos y el que podríamos habitar si estuviéramos dispuestos a escuchar otras lenguas, las de las células, las de los lobos.

A veces detener es una forma de fluir

Lectura de sueños interespecies. Si les late la ecología, el pensar el habitar, conocer más de las plantas y los animales no humanos, la crítica al extractivismo: este libro es muy recomendable.