Imagínese que está a punto de tomar un avión, sus vacaciones han comenzado o quizá es un viaje de negocios… ¿la visita a un pariente…? El tráfico, el aparcamiento, las colas de facturación, la espera para el embarque… El despegue. Algo de turbulencia, la sonrisa de una azafata displicente. ¿Se lo puede imaginar? Con esos colores impersonales, estrechos asientos, esa atmósfera seca. ¿Puede verlo…?
Pues, ahora, imagine que su piloto es un asesino en serie… Una leyenda celta olvidada, un pozo sagrado, una familia maldita y un investigador de lo paranormal que obtiene unas extravagantes psicofonías. Voces de ultratumba que lo conducen a revolver un pasado inquietante. Los secretos más inesperados se descubren, recorriendo maldiciones, aojamientos, asesinatos en manos de inocentes… Dos historias inconexas y, sin aparente relación, que chocan como dos trenes de alta velocidad en la misma vía dándole al lector un final sorprendente…