Zen y el arte del mantenimiento de la motocicleta

Cuando quieres precipitar algo significa que ya ha perdido importancia para ti y quieres dedicarte a otras cosas

estábamos entrenados para no verlo. Encaminados, quizás, a pensar que lo real era lo metropolitano y que todo esto era sólo un aburrido suburbio. Era algo intrigante. La verdad llama a tu puerta y uno dice: «Vete, estoy buscando la verdad», y así la ahuyentas. Intrigante.

Él estaba loco. Y cuando miras directamente a un loco, todo lo que ves es un reflejo de tu percepción de que está loco, lo que equivale a no verlo. Para verlo, debes ver lo que él vio,

Hay otras cosas que también encajan. Ellos hablan de vez en cuando de «eso» o de «todo eso», como en la frase: «No es posible escapar de eso». Y si yo preguntara: «¿De qué?», la respuesta podría ser: «De todo eso», o de «Todo eso tan organizado», o incluso «El sistema».

Quiero aproximarme lenta, pero cuidadosa e integralmente, con la misma actitud que recuerdo estuvo presente justo antes de encontrar ese pasador quebrado. Fue esa actitud la que lo halló, nada más.

Deberíamos notarlo en este viaje, explorarlo un poco, ver si en esa extraña separación entre lo que el hombre es y lo que hace puede haber algunas pistas sobre qué diablos se ha desajustado en este siglo veinte.

Desde el momento en que empezaban a trabajar, estaban tratando de no pensar en el trabajo. A su manera estaban intentando lograr lo mismo que John y Sylvia, vivir con la tecnología sin tener que involucrarse realmente con ella. Mejor dicho, algo tenían que hacer con ella, pero sus propios yoes estaban fuera, despegados, alejados. Estaban involucrados, cierto, pero no de una manera que les preocupara.

La verdad llama a tu puerta y uno dice: «Vete, estoy buscando la verdad», y así la ahuyentas.

verdad llama a tu puerta y uno dice: «Vete, estoy buscando la verdad», y así la ahuyentas

El aquí y el ahora de las cosas es algo que todos ellos conocen. Son los otros —los que hace años se mudaron a las ciudades y perdieron sus retoños— quienes lo han olvidado.