Entró Conyncks interrumpiendo la conversación; Marguerite hizo un gesto a su padre indicándole q
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—Decía mi tío que la adoración es el pan cotidiano de la paciencia, hablando del cristiano que ama a Dios.
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El grácil y triste movimiento con el que Marguerite buscaba protección, fue la primera expresión de aquel amor siempre arro
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Pues, querida Marguerite, aún puede usted salvarlos desprendiéndose de ellos. Inviértalos en la Deuda, a nombre de su hermano
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. El amor no es tan solo un sentimiento, sino también un arte. Una simple palabra, una deferencia, una nimiedad revelan a una mujer al grande y sublime artista que puede tocar su corazón sin lacerarlo.
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más o menos en la elección de una mujer, satisfacía además el orgullo del notario por la inmensa conside
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. Tu vida es la ciencia. Un gran hombre no puede tener mujer ni hijos. ¡Caminad solos en la miseria! ¡Vuestras virtudes no son las de las gentes vulgares, pertenecéis al mundo, pero sois incapaces de pertenecer ni a una mujer, ni a una familia!
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vida es la ciencia. Un gran hombre no puede tener mujer ni hijos. ¡Caminad solos en la miseria! ¡Vuestras virtudes no son las de las gentes vulgares, pertenecéis al mundo, pero sois incapaces de pertenecer ni a una mujer, ni a una familia!
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Nadie ha observado aún que los sentimientos poseen una vida que les es propia, una naturaleza que procede de las circunstancias en que nacieron;