Cuando los opuestos se atraen…
Damaso Pires no debería haber mantenido una relación con Marisa, la escandalosa princesa de Bengaria, pero pronto descubrió que, además de su extraordinaria belleza, su bondad tocaba algo en él que había creído destruido por su infancia en las calles de Brasil.
Pero su breve aventura iba a convertirse en algo serio cuando Marisa le reveló que estaba embarazada.
Damaso sabía lo que suponía ser hijo ilegítimo y, después de haber luchado con uñas y dientes para llegar a la cima del mundo financiero, no pensaba renunciar a ese hijo. Solo había una manera de reclamar a su heredero y era el matrimonio.