Guía práctica para cantar

correcta emisión se logra con una posición estable de la laringe (que no suba ni baje su posición en el cuello) y que permita su inclinación o vasculación hacia delante, lo cual se consigue mediante la coordinación tanto de la musculatura de la laringe como

músculos deben ser frecuentemente ejercitados para mantener su habilidad y poder afrontar los niveles de actividad que se les requiera en cada momento.

Si se conocen y respetan las limitaciones físicas y mentales de la persona en cada momento no se dañará la voz y por tanto no se comprometerá el futuro vocal.

Principio 2: El trabajo progresivo de la musculatura aumenta la fuerza y la resistencia.

Un buen entrenamiento de canto debe ejercitar la voz hasta los límites pero nunca excederlo.

Principio 1: El desarrollo muscular lleva su tiempo.

una manera sana de cantar hay un punto de equilibrio entre la presión del aire y la emisión que permite a las cuerdas vibrar sin necesidad de añadir un exceso de tensión muscular.

Cuando se canta sucede lo mismo, es necesario regular la acción muscular y emplear el tono muscular adecuado en cada momento.

timbre lo determina por un lado la configuración anatómica de los espacios de resonancia propia de cada persona y por otro la capacidad de modificar los elementos móviles que pueden generar más o menos espacio en las cavidades bucofaríngeas

por el control de la columna de aire.